Bienvenidos
iniciados, lugar ligado con la Vera Cruz o Lignus Crucis, rodeada de
misteriosos símbolos sin descifrar.....
Encomienda
Caravaca de la Cruz – Murcia.
En
1243 tras el Tratado de Alcaraz, sería
incorporada al Reino de Castilla, en este tratado el rey taifa
musulmán reconoce la soberanía de Fernando III, incorporándose
Murcia a la España cristiana, desde este momento el rey taifa y sus
pobladores deben someterse al vasallaje y protección de Fernando
III.
Durante
los primeros años de conquista 1243-1254 no se conoce presencia
templaría en Murcia.
Sobre
1263 Jaime I, la conquista tras mitigar un alzamiento
de los mudéjares, ayudado por la Orden del Temple.
Este
mismo año, Alfonso X dona Caravaca a los templarios en compensación
por su ayuda prestada en los alzamientos, sería entregada al maestre
Frey Martín Pérez.
Convertida
en encomienda, de ella dependerían las Fortalezas de Caravaca,
Cehegín y Bullas con sus propios territorios, así como los pueblos
de Singla y Canara.
Hay
un documento fechado en 1282 donde se
nombra a los comendadores de Caravaca, Cehegín y Bullas, sin
embargo, en otro fechado en 1286, se nombra solo a un
comendador, quien gobernaba estos tres castillos.
Este
mismo año, el rey Sancho IV confisca la Fortaleza de Caravaca y
Cehegín como castigo por no defender y perder el Castillo de Bullas,
el cual cayó en manos del alcaide musulmán de Huéscar, Ali Mohamed;
rápidamente
seria de nuevo recuperado por el maestre provincial Frey Sancho Yánez
acompañado de sus comendadores y caballeros, y del adelantado Don
Fernán Pérez de Guzmán; al parecer, una vez recuperado, el rey
mandó demoler el castillo convirtiéndolo en ruinas.
Alfonso
XI entregaría en 1344 las tres posesiones templarías a
su hijo bastardo Don Fadrique.
Iglesia
del Salvador.
Construida
en el S.XVI sobre un antiguo Hospital templario.
Fortaleza
– Santuario: Santuario
de la Santísima y Vera Cruz de Caravaca.
El
castillo sería rehabilitado y transformado en Santuario, e
instalaron en su exterior un cementerio.
Construyeron
una Capilla, la cual albergaría la Vera Cruz,
custodiada por los templarios desde 1266, la actual es
una copia de la original robada el 14 de febrero de 1934, el Vaticano
donaría unos pedacitos del Lignus Crucis custodiado por ellos.
Su
Torre del Homenaje es conocida como Torre Chacona, por quien la hizo
levantar, Don Juan Chacón.
En
el Altar Mayor se encuentra una una capilla que llaman “de
la aparición”, ya que en ella se puede ver
una ventana, ventana por donde hicieron aparición los ángeles con
la cruz, dicha ventana sería arrancada de la primitiva capilla y
colocada aquí.
Sobre
ella se dice que es templaría, pero no existe información que lo
confirme, sin embargo, no podemos mirar hacia otro lado sabiendo que
estuvieron aquí, y que aunque la documentación no les quiera dar
presencia, su simbología reaparece en los lugares donde estuvieron.
Esta
ventana denominada óculo, posiblemente porque es redonda, y por
otros una mándala con una doble estructura de ying-yang, la rodea
unas inscripciones que hasta el momento no han sido descifradas.
De
la primitiva capilla queda un óculo gótico, según Juan Atienza:
“de 75 centímetros de diámetro con la imagen doble del
ying-yang, rodeado de una inscripción en caracteres crípticos que
ha sido totalmente inútil tratar de descifrar, aunque ha sido
repetidamente transcrita y ha tenido múltiples e inútiles intentos
de interpretación”. Los
enclaves templarios.
En
la capilla donde se custodia la Cruz, se observa simbólicamente a
dos de sus custodios primitivos: Una Cruz del Temple y una Cruz de
Santiago.
“El
Madero de la Cruz no fue recubierto de riquezas hasta que el
comendador de la orden de Santiago, frey Lorenzo Suárez de Figueroa,
encargó y pagó con los bienes de la Orden un hermoso engaste de
oro. Más tarde, el 1711, el duque de Montalto y marqués de los
Vélez, sustituyó aquel por un finísimo engaste de oro que formaba
una caja de la misma figura que la cruz. En 1777 fue sustituido éste
por un rico engaste de oro adornado con rubíes, chispas y tres
grandes diamantes, que fue regalado por el duque de Alba”. Gran
Guía de la España Templaría. Templespaña.
Torreón
de los Templarios.
Edificado en el S.XVI por
la Orden de Santiago, sobre unas ruinas ya existentes, se cree que
templarias, de ahí su nombre, ya que posiblemente:
“estas
ruinas habrían formado parte en la antigüedad de una convalecencia
edificada por los caballeros templarios. Los santiaguistas edificaron
el torreón precisamente para que sirviese de convalecencia a sus
caballeros y de hospital a los peregrinos que iban de paso con el
deseo de postrarse ante la Santísima y Vera Cruz”. Gran
Guía de la España Templaría. Templespaña.
Rituales.
Se celebran unas fiestas
los primeros 5 días de Mayo, donde lo primero que se hace es oficiar
una misa en un lugar en medio del río denominado “Templete del
baño”, es curioso que sea cerca del río, del agua, los que hayáis
leído más entradas mías: “¿No os recuerda a tradiciones paganas
de las ninfas, Chanas, camufladas hoy en día en santas o vírgenes?”.
Representa en toda regla a
“un altar a la divinidad de las aguas”.
Seguidamente veremos una
carrera llamada “de los caballos del vino”, relacionada con la
época templaría, se recuerda un momento en el que durante una
invasión musulmana al castillo, el agua escaseaba, un grupo de
freires templarios salieron del mismo y volvieron enfrentándose a
los musulmanes cargados con pellejos llenos de vino.
En este vino fue bañada la
Vera Cruz y todos los que bebieron de él quedaron saciados y
recuperados.
Otro de los rituales es el
llamado “baño del agua”, consistente en bañar la Santa Reliquia
en el templete octogonal con arcos que hemos mencionado
anteriormente, la gente llega a beber e incluso a bañarse en este
agua donde se ha sumergido la Cruz.
El
cuarto día se pasea la Cruz por hospitales, cárcel, enfermos...
El
quinto día vuelve a su santuario, sin embargo hasta el mes de
Octubre, saldrá todos los días a las cinco de la tarde para dar
fuerza a los campos.
Para
algunos autores se produce una unión entre una fiesta pagana con una
cristianizada, se unen la Tierra y el Agua, lo agrario, la Madre
Tierra ha sido cristianizada y representada en este caso por la Cruz.
Me
gusta lo que comenta Juan G. Atienza: “el caballo es un
elemento cabalístico. Es el portador de la sabiduría o de la
iniciación. Es el portador del soma de la experiencia transcendente:
el vino de Noé, la bebida divina que habría que convertirse,
convenientemente destilada por los alquimistas en el agua vitae,
elixir de experiencias trascendentes. En este caso, la bendición del
vino por la cruz hace que la bebida se sacralice totalmente y que, en
consecuencia, queden sacralizadas las flores que luego habrán de
repartirse, como elementos portadores de la transcendencia, entre los
asistentes”. Guía de la
España Mágica.
La
Leyenda.
El rey quiso saber más
sobre ello y permitió le fueran facilitados los ornamentos
sacerdotales que le hicieran falta para la ceremonia, llegado el
momento faltaba la Santa Cruz.
Aquí encontramos dos
versiones:
Una que nos cuenta que el
propio rey señaló hacia arriba cuando el sacerdote le describió la
forma de la cruz, mientras era transportada por dos ángeles rodeados
de un haz de luz que entraban por una ventana.
Otra nos dice que se abrió
un arco en la pared del que salieron dos ángeles portando una cruz y
la depositaron en el Altar.
Tanto en una versión como
en la otra, el final fue la conversión al cristianismo del rey, su
esposa y sus hijos, cambiando su nombre por Vicente Bellvís.
La reliquia sería
custodiada en un arca cerrada bajo tres llaves.
ENCOMIENDAS TEMPLARIAS EN LA CORONA DE CASTILLA.
Pica sobre ella para ir a su entrada.
26.- Encomienda de Juncos – Toledo. (No hay información).
Bibliografía:
Los
templarios en los Reinos de España. Gonzalo Martínez Díez.
Rutas
por la España de los templarios.
Los
enclaves templarios. Juan G. Atienza.
Enclaves
templarios. María Lara Martínez.
Gran
Guía de la España Templaría. Templespaña.
Guía
de la España Mágica. Juan G. Atienza.
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