Bienvenidos
iniciados, seguiremos recorriendo la llegada de los templarios a los
Reinos de España trasladándonos a Castilla y León....
Reino
de Castilla y León.
Alfonso
VII “el emperador” (1105 – 1157):
Alfonso
VII. Miniaturo Tumbo A
Catedral Santiago de
Compostela
Alfonso ya conocía la
existencia del Temple a través de su tía doña Teresa en Soure
(Portugal) en 1128, se encontraba presente en una de las donaciones
que realizaría a la Orden; más aún, los templarios tuvieron que
atravesar el territorio del Reino de León para recibir la donación.
Sancha.
Liber Feudorum Maior.
Archivo
Corona de Aragón
Incluso su hermana, doña
Sancha, fiel seguidora de Bernardo de Claraval, ayudaría a la
fundación de varios conventos cistercienses, lo que indica que ya
tenían conocimiento de la Orden.
La primera huella
documentada aparece en 1146 con la donación de la
villa de Villaseca (Soria) (hoy despoblada)por parte del rey; más
tarde en 1148 se hace entrega a Rigaldo Viver,
comendador de Novillas y a Elías Folcaldo/Fulcaldo, de un molino en
Vozmediano.
La presencia templaria en
tierras leonesas la encontramos en un documento en el cual el Obispo
de León, don Juan da testimonio y expide haber confesado y dado la
orden sacerdotal a un tal N. Arnoldo, de la Orden del Temple en mayo
de 1153.
Alfonso VII asignaría a su
hijo mayor Sancho III, el gobierno de las tierras en La Rioja y Soria
en 1148.
En 1157 la
ciudad de Almería es sitiada y tomada por los almohades, durante la
vuelta a casa, tras la sufrida derrota de Almería, Alfonso VII muere;
el Reino de Castilla y León sería dividido entre sus dos hijos:
Privilegium
imperatoris
- Sancho III “el deseado” hereda Castilla y Toledo.
- Fernando II hereda León y Galicia.
El
Estigma de Calatrava:
El
castillo de Calatrava, situado en primera fila de combate, unía el
camino Toledo-Córdoba, vía de comunicación entre cristianos y
musulmanes.
Conquistado
en 1147 a los
musulmanes, es donado a la Orden del Temple por Alfonso VII en 1149;
con esta donación los colocaba como muro o barrera en las fronteras
del Reino leonés.
Cuando
los almohades cruzan el Estrecho, comienzan a conquistar territorios
pertenecientes tanto a musulmanes como a cristianos, en 1157
asedian y toman Almería, muriendo tras la derrota Alfonso, de manera
que su hijo Sancho III tendrá que hacer frente al nuevo enemigo que
se dirige hacia su recién estrenado reino.
El primer lugar estratégico
con el que el enemigo se encontraría sería el Castillo de Calatrava
en poder templario, sin embargo, devolverán el castillo ese mismo
año.
Castillo
de Calatrava La Vieja
La solución al conflicto
no es otra que ofrecer Calatrava, sus aldeas y términos a aquel que
se haga cargo de su defensa ante los almohades, la propuesta no tuvo
mucho éxito.
En
esos momentos se encontraba por estas tierras el abad del Monasterio
cisterciense de Fitero, fray Raimundo junto a otro monje llamado fray
Diego Velázquez, quien había servido anteriormente en el ejército
de Alfonso VII, fueron ellos quienes solicitaron hacerse cargo de
Calatrava, siendo formalizada la concesión en Enero de 1158.
A
raíz de tal concesión y acontecimiento, surge la nueva
Orden de Calatrava, con el consentimiento y apoyo económico del rey, además el arzobispo de Toledo, concede indulgencias a todo aquel que entrara en la recién creada Orden, ya fuera a través de su persona o contribuyendo con donaciones económicas o de avituallamiento.
Orden de Calatrava, con el consentimiento y apoyo económico del rey, además el arzobispo de Toledo, concede indulgencias a todo aquel que entrara en la recién creada Orden, ya fuera a través de su persona o contribuyendo con donaciones económicas o de avituallamiento.
El gran número de voluntarios,
así como de medios conseguidos haría que el ataque de los almohades
no se materializarse, convirtiéndose en la primera victoria de la
Orden de Calatrava.
Por
parte de la Orden del Temple, la decisión de abandonar la fortaleza
sería conocida por toda Castilla, influyendo negativamente en su
reputación, como en sus donaciones a lo largo del territorio; es
más, parte de estas donaciones irían a parar a manos calatravas,
como ejemplo podemos contar el acontecido con caballeros castellanos
que ingresaron en la Orden templaria y la abandonarían para ingresar
en la calatrava.
La decisión de abandonar
Calatrava por los templarios vendría dada tras evaluar sus medios
tanto humanos como económicos y constatar que no serían capaces de
llevar a cabo la tarea encomendada.
“ los
frailes de la orden del Temple, que ocupaban la fortaleza de
Calatrava, ante la posibilidad de que no fueran capaces de resistir
la embestida de los árabes, acudieron al rey Sancho a rogarle que se
hiciera cargo de la fortaleza y de la villa de Calatrava, ya que
ellos no tenían fuerzas suficientes para hacer frente a los árabes
y no habían encontrado ningún poderoso dispuesto a asumir el riesgo
de la defensa. Se encontraba por entonces en Toledo un clérigo,
Raimundo, abad de Fitero, acompañado de un monje llamado Diego
Velázquez, de origen noble y antaño experto en cosas de la milicia,
junto al rey Sancho. Al darse cuenta de la preocupación del rey ante
el peligro que corría Calatrava, aconsejó al abad que le solicitara
ésta al rey; y aunque en un principio el abad se mostró reticente,
acabó por acceder a los ruegos del monje...”. Crónica
del arzobispo Jiménez de Rada. El Legado Templario. Juan G. Atienza.
Decisión acertada o no,
cada uno puede tener su opinión, la mía es que si el obispo de
Toledo hubiera tomado la decisión de apoyarlos de igual manera que
lo hizo con los calatravos, podrían haber seguido con la defensa.
Igualmente estos motivos
son los que aparecen en los libros, puede ser que tuvieran otros
motivos ocultos, que taparon con esta pobre defensa.
Y si seguimos los
principios templarios, entre su Regla y Constituciones, aquel que
abandonara el gonfalón y huyese por temor a su enemigo, tendría por
castigo la expulsión inmediata de la Orden, que mayor deshonor para
un caballero templario.
Castilla
con Sancho III “el deseado” (1134 – 1158):
Nombrado
Rey de Nájera
por su padre Alfonso VII en 1148,
gobernaría La Rioja y Soria, mantendrá a la Orden del Temple a su
lado.
Durante
su reinado, confirmaría la donación en septiembre de 1155
del Obispo de Calahorra a la Orden de todos los derechos de la
iglesia de la villa de Alcanadre; al mismo tiempo, don Rodrigo de
Azagra dona la propia villa de Alcanadre, haciendo lo mismo con
Aradón (hoy despoblada) un año más tarde.
A
la muerte de su padre en 1157,
es coronado Rey de Castilla y Toledo,
momento que se tendrá que enfrentar al conflicto del abandono del
Castillo de Calatrava por la Orden del Temple.
Castilla
con Alfonso VIII “el noble” (1155 – 1214):
Miniatura
Alfonso VIII
Durante
la segunda mitad del S.XII, las donaciones y noticias del Temple en
Castilla van a ser escasas; existe un diploma fechado el 3
febrero 1207,
en el que Alfonso VIII ordenó a gran parte del término toledano a
acudir a su hueste, incluyendo las propiedades de *abadengo de las órdenes.
No
es hasta enero de 1183
cuando aparece una donación por parte de Alfonso al Temple, se trata
de la Iglesia de San Miguel en Moral de la Reina, incluido sus
derechos y distintas heredades, a cambio de la entrega de la Iglesia
de San Nicolás del Real Camino.
El
20 abril 1194
se firma el Tratado de Tordehumos
entre los reyes Alfonso VIII de Castilla y Alfonso IX de León, con
el cardenal Gregorio como mediador. Entre los acuerdos, cada parte se
comprometía a entregar 5 castillos a la Orden del Temple en León, y
Orden de Calatrava en Castilla.
Su
reinado se caracterizaría por los continuos enfrentamientos con los
almohades, en uno de ellos, más concretamente el 14
octubre 1211
muere su heredero, Fernando; produciéndose bajo su reino dos de las
batallas más conocidas:
- Batalla de Alarcos: 19 julio 1195 conocida como el “Desastre de Alarcos”.
- Batalla de las Navas de Tolosa: 16 julio 1212.
de ellas he hablado extensamente
en entradas anteriores, si queréis saber más sobre ellas picar
encima de sus nombres.
Alfonso
VIII moriría el 6 octubre 1214,
en su Testamento deja a las distintas órdenes sus armas, de manera
que divide en tres lotes iguales, asignando:
- Primer lote se le asigna a la Orden de Santiago.
- Segundo a la Orden de Calatrava.
- Tercero se subdivide en dos partes desiguales: dos tercios para la Orden de los Hospitalarios, y un tercio para el Temple.
Castilla
con Enrique I (1203 – 1217):
Su reinado duró más bien
poco, accedió al trono con apenas 10 años, siendo su hermana
Berenguela quien se hiciera cargo de la regencia, quedando Enrique
bajo la tutela del Conde Alvaro Nuñez de Lara.
Moriría accidentalmente en
1217, momento en el que su hermana sería proclamada
Reina,quien renunciaría al trono a favor de su hijo Fernando III “el
santo”, heredero al Reino de León.
Con Alfonso IX, Rey de
León, marido de Berenguela de Castilla, se unificaría de nuevo
Castilla y León.
Bibliografía:
- Los Templarios en los Reinos de España. Gonzalo Martínez Diez.
- Codex Templi. Templespaña.
- El Legado Templario. Juan G. Atienza.
- Panoramica de la Orden del Temple en la Corona de Galicia-Galicia-León. Carlos Pereira Martinez.
- Historia Universal. Ediciones Rueda.
- Historia de Iberia Vieja. Nº 51.
- Historia de Iberia Vieja. Nº 80.
- Muy Historia. Nº 61
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