Bienvenidos iniciados,
hoy siguiendo el tema Cruzadas, hablaremos sobre la Tercera (1188-1192), en
ella aparece algunos de los personajes mas comentados e interesantes de la
historia de las cruzadas, Salau al-Din Saladino, y Ricardo I “Corazón de León”....
NOTA: En el mapa la fecha
que aparece, hace referencia al año oficial de la salida de esta Tercera
Cruzada.
En esta cruzada jugaría
un gran papel y protagonismo Salau
al-Din Saladino, visir de Egipto y principal caudillo del ejército musulmán.
Mostraba unas grandes
capacidades estratégicas, conquistaría con gran éxito Damasco y Alepo; acercándose
a Jerusalén.
A través de un pacto
con el emperador bizantino Andronico Comneno, sus tropas se harían con el
control territorial y el debería reconocer la soberanía imperial, esto traería
como consecuencia el no apoyo por parte
de Andronico a los francos; aunque no podemos olvidar que su capacidad militar había
sido mermada en 1176 tras un enfrentamiento en Miriocefalon.
A comienzos de 1187 se produciría el estallido de Saladino, causado por las
continuas violaciones de la tregua: tregua pactada y firmada entre Saladino y
Balduino IV sobre 1180. En esta
ocasión las dificultades en el tráfico comercial por parte de las caravanas de
Saladino, el hostigamiento a los peregrinos musulmanes que se dirigían a La Meca y por último, la
incautación de un inmenso botín proveniente de una caravana, provocarían la
llamada yihâd a los musulmanes.
Por el lado cristiano,
Guido de Lusignan junto al conde Raimundo de Trípoli, barones y las ordenes
militares, reuniría a finales de junio
de 1187 “en la proximidades de Nazaret, lo que se considera el ejercito mas
numeroso de cuantos hasta ese momento habían operado en Tierra Santa: unos
14.000 hombres, de entre los cuales destacarían 1.200 caballeros completamente
equipados –la mitad freires templarios y hospitalarios-, unos 4.000 turcopolos,
caballería ligera mercenaria integrada por nativos cristianos o musulmanes, y
aproximadamente unos 8.000 peones, incluido el campesinado movilizado”.
Las Cruzadas, Carlos de Ayala Martínez.
Las Cruzadas, Carlos de Ayala Martínez.
El resultado fue una
brillante victoria por parte de Saladino en la conocida Batalla de Hattin; seguiría conquistando toda Galilea y el puerto
de Acre, sobre septiembre Avalon se uniría a sus victorias y comenzó
a sitiar Jerusalén, después de varios días conseguiría la ciudad santa del
Islam.
En Occidente las
noticias llegadas de Tierra Santa fueron un gran impacto, el papa Gregorio VIII achaco esta perdida al
fruto del pecado de los hombres, incluida la señal con la desaparición de la
sagrada reliquia “La Vera Cruz”.
Su sucesor Clemente III uniría al emperador
Federico Barbarroja poniéndose en movimiento en 1188/9 hacia Tierra Santa, por otro lado Felipe II Augusto como rey
de Francia y Ricardo I “Corazón de León” como rey de Inglaterra lo hacían a
mediados de 1190.
Como legado papal en la Tercera Cruzada ,
se nombro al arzobispo de Pisa.
No podemos olvidarnos
de un personaje que no suele aparecer en los reportajes sobre las Cruzadas y
que tuvo un papel muy importante en esta: Conrado
de Montferrat, era hermano del primer marido de Sibila y tío, del rey
Balduino V, se encargaría de la defensa de Tiro, cuando Saladino se dirigía
hacia Jerusalén, defendiendo la ciudad y sus refugiados y ganado por dos veces
los embistes de las tropas musulmanas.
Conrado seria el
encargado de mandar al arzobispo Josias a Occidente para que entregara unas
cartas escritas personalmente y dirigidas a genoveses, pisanos, alemanes e
ingleses para una pronta intervención, se puede deducir de esta acción, que
seria el promotor y propagandista de esta cruzada.
El primero en contestar
seria “el rey Guillermo II de Sicilia mandando una flota de medio centenar de
galeras para reforzar la resistencia del puerto de Tiro”. Las Cruzadas, Carlos
de Ayala Martínez.
El emperador Federico Barbarroja se pondría en
marcha el 23 de abril de 1189 desde Ratisbona siguiendo una ruta terrestre,
sin embargo en junio de 1190 se ahogaría
en el río Salef, con la consiguiente dispersión de la tropa que llegaría a Acre
en octubre de 1190.
Mientras tanto Felipe II Augusto y Ricardo I zarparían hacia Ultramar en julio de 1190, el primero desembarcaría
en Acre la primavera de 1191, y el
segundo lo haría en las costas de Chipre, conquistándola junto con la
colaboración de Guido de Lusignan en mayo de 1191.
Los contingentes
primero franceses y luego ingleses se dirigieron a consumar la conquista de
Acre, el larguísimo asedio al que estaba siendo sometida, duraría un mes mas,
terminando con la rendición musulmana en julio de 1191.
Tras el reparto del botín,
había que nombrar el futuro rey de Jerusalén, el nombramiento estaba entre
Conrado de Montferrato y Guido de Lusignan, quedando este ultimo como rey
vitalicio, teniendo que compartir las rentas de la corona con Conrado, tras su
muerte seria nombrado rey sucesor Conrado.
El rey de Francia decidiría
regresar a su país, dejando al mando de las tropas francesas al duque Hugo de
Borgoña, no sin antes firmar un pacto de no agresión sobre los dominios con
Ricardo I, mientras este se encontrara en Tierra Santa.
Por su lado, Ricardo lo
primero que hizo fue ejecutar a 3.000 cautivos musulmanes, por un lado esta acción
intentaba provocar a Saladino, y por otra debilitaba al ejercito musulmán.
En su marcha hacia
Jerusalén, serian acosados por los arqueros turcos, forzando el enfrentamiento
a campo abierto en la llanura de Arsur sobre septiembre, con la victoria
cristiana.
Aunque Ricardo saliera
como triunfador de esta batalla, sobre sus espaldas mantenía y debía solucionar
distintos problemas políticos y sobre todo el relacionado con su hermano Juan
Sin Tierra en Inglaterra.
Como solución, firmo
un Tratado de tregua con Saladino en septiembre de 1192, conocido como Tratado
de Jaffa, en el “se reconocía la soberanía cristiana sobre el conjunto de
los territorios conquistados a lo largo de la costa hasta Jaffa; preveía el
desmantelamiento de Ascalon, refortificado por el rey Ricardo, y contemplaba el
libre acceso de los peregrinos a los Santos Lugares, incluido naturalmente el
Sepulcro de Jerusalén que permanecía bajo control islámico”. Las Cruzadas,
Carlos de Ayala Martínez.
Tratado de Jaffa.
Ricardo abandonaría
Tierra Santa regresando a Inglaterra, aunque no lo haría hasta los primeros meses de 1194; durante todo este tiempo pasaría por ser detenido en Austria
por el duque Leopoldo y un año en prisión por orden del emperador alemán
Enrique VI.
Al mismo tiempo,
Saladino moriría en marzo de 1193.
Este final de la Tercera Cruzada vendrá
acompañado de un gran escepticismo en Occidente, el entusiasmo social se
apagara o mas bien, no tendrá la misma intensidad.
Si estáis interesados en las demás Cruzadas, aquí os dejo los enlaces:
Gestación y Primera Cruzada: 1095 - 1099
Segunda Cruzada: 1145 - 1149
Cuarta Cruzada: 1198 -1204
Quinta Cruzada: 1217 - 1221
Sexta Cruzada: 1228 - 1243
Séptima y Octava Cruzada: 1248 - 1254 / 1270 ...
Si estáis interesados en las demás Cruzadas, aquí os dejo los enlaces:
Gestación y Primera Cruzada: 1095 - 1099
Segunda Cruzada: 1145 - 1149
Cuarta Cruzada: 1198 -1204
Quinta Cruzada: 1217 - 1221
Sexta Cruzada: 1228 - 1243
Séptima y Octava Cruzada: 1248 - 1254 / 1270 ...
- Codex Templi.Templespaña
- Misterios de la Edad Media. Jesús Calleja
- Las Cruzadas. Carlos de Ayala Martínez
- muyinteresante.es
- wikipedia
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